La iglesia ha canonizado oficialmente a varios millares. Pero existe una inmensa cantidad de santos no canonizados, que ya están gozando de Dios en el cielo. A ellos especialmente está dedicada esta fiesta.
La Biblia afirma que al Cordero de Dios lo sigue una multitud incontable. Esta es la voluntad de Dios: Que lleguemos a la santidad.
¿Somos conscientes de la importancia que tiene el modo en que celebramos una festividad? Las fiestas que celebramos reflejan quiénes somos e influyen en nuestros valores. Atrevámonos a ser diferentes. Sembremos una semilla de vida, de luz, de santidad entorno a esta festividad y alejémonos de la oscuridad del alma, de lo superficial, del sinsentido. Busquemos alternativas por nosotros y por nuestros jóvenes y niños, unámonos a otras personas y familias que quieran vivir esta festividad con un sentido cristiano en lugar de búrlanos de los muertos, acercarnos a los espíritus malignos o abriendo la puerta al demonio.
La vida nos plantea elecciones cada día, también para esta festividad podemos elegir: dejarnos llevar o defender nuestras creencias; poner la mirada en los santos o en las brujas, en la Vida eterna o en la muerte, en los ángeles o en el demonio, en la luz o en la oscuridad,…
Los cristianos estamos en el mundo para ser luz. Debemos impulsar una celebración de la Fiesta de Todos los Santos y del Día de difuntos con un sentido cristiano. La Fiesta de Todos los Santos nos recuerda que todos estamos llamados a la santidad. Conocer las vidas de los santos nos ayuda en nuestro propio camino de santidad.
Puede parecer que somos insistentes, pero es que no podemos, no debemos dejar de serlo. En los supermercados, en las tiendas, en las grandes superficies, en los cines, en la radio, en la televisión en internet, por WhatsApp, ¿Nos hablan de los santos? ¡Nooooooooooo! ¡Hagámoslo nosotros!
Por una sencilla razón: ¿Qué queremos para nuestros jóvenes y para nuestros pequeños?
Seamos conscientes de que recogeremos lo que sembremos.
¡Remamos contra corriente! ¿Sí? ¡Pues enhorabuena, porque de lo contrario te verás arrastrado!